La apendicitis comienza con un dolor cerca del ombligo, que luego se traslada al lateral derecho. Suele estar acompañado de náuseas, vómitos, pérdida del apetito, fiebre y escalofríos.
La apendicitis suele tratarse con cirugía y antibióticos. Si no se trata, el apéndice puede reventarse y causar un absceso o una infección sistémica (sepsis).